El presidente boliviano Evo Morales sufrió este domingo un fuerte revés en las elecciones judiciales -únicas en su tipo- después de que la opción del voto nulo impulsada por sus opositores superase el 50 por ciento de las papeletas.

Las elecciones para el poder judicial son una de las reformas impulsadas por Morales para “descolonizar” la justicia de ese país. Sin embargo, en esta ocasión fueron tomadas como un referendo sobre la popularidad del presidente, después de que esta semana el Tribunal Constitucional del país emitiera un fallo que lo habilita como candidato a un tercer período en los comicios generales del 2019.

Según reporta el diario El Deber, el voto anulado llegó hasta el 53 % para la votación del Tribunal Agroambiental, mientras que en el caso del Consejo de la Magistratura marcó un 53,76% y entre el 45 y el 55% para el Tribunal Constitucional Plurinacional y el Tribunal Supremo de Justicia.

Según datos del Órgano Electoral Plurinacional, la participación en los comicios habría alcanzado el 78 %.

En las últimas semanas, sectores de oposición habían  llamado a participar y anular el voto como una señal de protesta en contra de una elección que creen se dará entre candidatos afines al gobierno. Tras la decisión judicial de habilitar a Morales como candidato, esta elección fue considerada como un medidor de popularidad para el gobierno.

En la mañana del domino, el vicepresidente del país, Álvaro García Linera, dijo que la convocatoria a anular el voto era irresponsable y que en términos legales bastaba con que un candidato obtuviese más de 157 votos para ganar, en alusión al número de parlamentarios que en el pasado elegían a las autoridades del poder judicial.

El ex ministro de Gobierno, Hugo Moldiz, bajó el perfil a la derrota oficialista en conversación con El Deber  y negó que se tratara de un plebiscito dado que “se ha demostrado que una cosa es cuando Evo está en la papeleta y otra cuando no, pongo las elecciones subnacionales como referencia”. Sin embargo, reconoció que “es una señal que el Gobierno, el MAS, los movimientos sociales deberán analizar con calma, objetividad. En los próximos meses, el Presidente soportará una ofensiva a la intención de repostular el 2019. Dependerá mucho de su capacidad de resistencia, para trasformar ese mal momento en una nueva victoria, como sucedió el 2008 y 2009”.

Por su parte, el empresario y eterno candidato a la presidencia, Samuel Doria Medina, dijo mediante sus redes sociales que “hoy hemos vuelto a escuchar la voz de los ciudadanos, y hoy, al igual que el 21 de febrero, los ciudadanos han derrotado a Evo Morales, a un caudillo que intenta imponer la Bolivia de la reelección, de la corrupción y la manipulación de la justicia”.

 

Foto: Sebastián Baryli