La Organización No Gubernamental venezolana Ciudadanía en Acción aseguró esta semana que más de 1 millón 200 mil venezolanos sufren de desnutrición crónica.

El informe, presentado por Edison Arciniegas, director de esta ONG, señala que esta situación es más dramática en los estados Amazonas, Apure, Delta Amacuro, Monagas y Sucre.

Los datos fueron presentados en el marco de la jornada “Comercio, Servicios y Petróleo”, organizado por la Fundación de Atención Integral al Pueblo Legislador y la Dirección de Comunicación Ciudadana de la Asamblea Nacional -suspendida por la Asamblea Constituyente oficialista- y advierten que estas personas están padeciendo desde el año 2015 una severa desnutrición protéica, lo que significa que están consumiendo aproximadamente el 10 % de las proteínas y en el caso de las calorías, menos del 40 %.

En términos concretos hay 50.000 venezolanos que tienen su vida comprometida para el próximo trimestre, producto de la desnutrición, por lo que se necesita la adopción de medidas de emergencia, asegurando que estas medidas están en el mar, por eso se requiere que el diálogo que se va a continuar el 15 de diciembre en la República Dominicana, logre por la vía de la flexibilización de los términos, del acuerdo político, que vengan a Venezuela desde Colombia, no menos de 3.000 camiones cargados de alimentos terminados y de insumos para la producción y no menos de 50 barcos desde Canadá, Argentina, Brasil, Paraguay, México y Perú que son grandes exportadores de alimentos, que nos permitan atender la emergencia y aprovechar el invierno que promete ser generoso para volver a producir alimentos en el país, señala Arciniegas.

Advierte que es la hora de los acuerdos, advirtiendo que lamentablemente, si no se toman medidas en diciembre, enero va a ser muy tarde, y todos los factores políticos, la oposición representada por la Unidad Democrática y el Gobierno, deben priorizar las soluciones, es la hora de poner por delante la tragedia del pueblo y salir de la realidad paralela en la cual, nuestras élites están en este momento.

Ratificó que en estos momentos, los agricultores venezolanos no tienen semillas, fertilizantes, agroquímicos, repuestos para las maquinarias, no tienen financiamiento y no tienen dólares para importar los insumos que necesitan para impulsar las siembras.

Explicó que en el 2017 se logró sembrar 1 millón de hectáreas de diversos rubros, porque los productores tenían aún stock de los años anteriores, stok que se agotaron, señalando que cuando se ve hacia el campo no hay siembra, cuando se ve hacia el mar, no hay barcos llegando, por lo que el panorama no es nada alentador para el próximo año, si no se adoptan medidas de inmediato, advirtió Arciniegas.

Caritas habla de 300.000 niños

Esta semana, el rotativo italiano Avverine de Italia realizó una entrevista a Susana Rafalli, miembro de la organización Cáritas, quien afirmó que os últimos monitoreos realizados en cuatro estados de Venezuela se constató que 280.000 niños presentan desnutrición y podrían morir de hambre en los próximos meses.

“El nivel de desnutrición infantil ha superado el umbral de la emergencia humanitaria”, explicó Rafalli. “Es desastroso que 33% de la población infantil presenta retrasos en su crecimiento. Este daño físico y mental es irreversible”, añadió.

En Caracas ocurren de 5 a 6 muertes de niños semanales por causa de la desnutrición, de acuerdo con la información registrada por Cáritas.

La economía venezolana decayó después de que los precios del petróleo disminuyeran. Además, se le atribuye la resposabilidad por la crisis a medidas económicas erradas del gobierno venezolano.

En la entrevista a Rafalli, realizada por el diario italiano, se destaca que 9 de cada 10 hogares con niños no pueden cubrir el costo de sus comidas diarias.

“La ayuda humanitaria es necesaria para salvar vidas. No lo habría dicho hace un año, porque la gente no se estaba muriendo”, indicó Rafalli, quien después de haber participado en programas de atención a la crisis alimentaria en África, se sorprende al reconocer los síntomas en su tierra natal.

“La progresión es la misma: los niños desnutridos son cada vez más jóvenes y las causas más graves”, concluyó.

Imagen: A tu Salud