Un video en el que una mujer insulta a otra mujer de pollera en un bus de transporte público en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra ha generado una ola de rechazo entre los bolivianos, que, al menos de manera simbólica, creían haber avanzado un poco desde la promulgación de una ley en contra de toda discriminación.

En las imágenes se ve a una mujer que, aparentemente, no quiere compartir su asiento con la otra, por lo que comienza a insultarla y a recordarle que no está en su tierra y que usa pollera.

Desde la llegada de Evo Morales al poder -hace 12 años- los bolivianos creían que las demostraciones públicas de racismo habían disminuido, en parte por la ley contra la discriminación, sin embargo, muchos ejemplos como el de este video muestran que aquel racismo tradicional en el que los blancos menosprecian a los indígenas siguen vigentes en el día a día de un país dividido.

La Ley contra el racismo y toda forma de discriminación, promulgada por Morales en el 2010, sanciona con una pena de tres a siete años de prisión a “la persona que arbitrariamente e ilegalmente, restrinja, anule, menoscabe o impida el ejercicio de derechos individuales o colectivos por motivos de raza, origen nacional o étnico, color, ascendencia, pertenencia a naciones y pueblos indígena originario campesinos o el pueblo afroboliviano o uso de su vestimenta o idioma propio, será sancionado con pena privativa de libertad de tres a siete años”.