El Parlamento colombiano nunca ha sido un lugar de bien y sus nuevos funcionarios, electos el 11 de marzo, no son la excepción, toda vez que 42 de los 280 congresistas están siendo investigados por delitos de distinta índole. 

Así lo revela el informe titulado Democracia Secuestrada de la fundación Paz y Reconciliación, divulgado por Noticias Uno.

De estos parlamentarios que tomarán posesión el 20 de julio del presente año, serían 19 los Senadores electos con investigación en curso y 23 Representantes de la Cámara.

Los investigados resultarían curiosamente ser en su mayoría pertenecientes a los partidos políticos tradicionales de la derecha, que siempre han abarcado la mayoría de escaños del Congreso y continúan haciéndolo aún con políticos investigados por la justicia.

El partido Cambio Radical tendría el liderazgo con 13 congresistas investigados, seguidos por el colectivo del presidente Juan Manuel Santos, partido de la U, y continuando con los partidos tradicionales de Colombia: Liberal y Conservador.

Según León Valencia, director de la fundación Paz y Reconciliación, de los 42 investigados elegidos para ir al Congreso probablemente varios no alcancen a posesionarse, dependiendo de la celeridad de la justicia, pues a algunos de estos ya sus procesos están prontos a dictar sentencia o existen motivos fundados para imponerles medidas que los inhabilite para su ejercicio en el cargo.

Entre varios de los investigados, se encuentran algunos a los que se les definirá su situación judicial respecto a escándalos como los sobornos de Odebrecht, el cartel de la toga y demás polémicas de corrupción que azotaron al país.