La polémica está servida en un barrio de Santiago de Chile. Nadie quiere ser llamado clasista dentro del grupo de vecinos que se oponen a la llegada de viviendas sociales en un acomodado barrio de la capital chilena, sin embargo, esa es la razón principal detrás de su curiosa manifestación.
Durante el fin de semana, un grupo de residentes de Las Condes, protestaron con un “cacerolazo” por lo que “la falta de consulta” (eufemismo para rechazo) de las viviendas sociales que se quieren construir en el lugar.
La manifestación se convocó en el centro comunitario de la zona, apuntado las principales críticas al alcalde de Las Condes, Joaquín Lavín.
“Se organizaron los vecinos por un tema de parar, en base a un plebiscito, las obras en altura en este sector. Un sector que demográficamente ya está colapsado y lo que estamos solicitando es parar el impacto vial que tiene la rotonda Atenas…vial, social, de higiene, etcétera”, dijo a la radio Cooperativa la presidenta de la junta de vecinos de Los Volcanes, Alejandra Alonso, aceptando que el rechazo tiene color de clase.
La dirigenta agregó que la protesta es “en contra de Joaquín Lavín, no nos tomó en cuenta para nada. Esto tendría que haber sido un plebiscito. Nuestras casas van a bajar la plusvalía, no se cuánto, ya sabemos que más o menos entre un 30 y un 40 por ciento”.
Por su parte, el alcalde Joaquín Lavín sostuvo que los vecinos están en su derecho de protestar, pero considera que existe desconocimiento sobre los detalles del proyecto.
“Obviamente que este proyecto lo vamos a conversar. Es un proyecto importante, de una ciudad integrada, inclusiva, además son otros vecinos de Las Condes, que viven 10 cuadras, 15 cuadras más arriba que quieren tener también la oportunidad de poder seguir viviendo en la comuna”, dijo el alcalde a un canal de televisión.