La versión de la noticia dice así: una familia de Caracas denuncia que fue desalojada de una casa que les habían asignado dentro de los programas estatales de vivienda por burlarse del atentado sufrido por Nicolás Maduro la semana pasada. 

“Ellos dicen que mi esposo y yo nos burlamos del atentado contra Nicolás Maduro y que no merecíamos vivir en un complejo chavista”, dijo Limbania Ramírez, según reporta el diario peruano El Comercio. 

La organización de derechos humanos Provea, que denunció inicialmente el caso, dice que la familia “fue desalojada arbitrariamente, sin orden judicial”.

Limbania Ramírez vivió hasta el pasado jueves con su esposo, y ocasionalmente con un hijo de 15 años, en un apartamento construido en predios del mayor complejo militar del país.

Según su versión, su expulsión fue ordenada por la jefa del gobierno de Caracas, la oficialista Carolina Cestari, y civiles armados a quienes acusa de haberla amenazado.

Empleada pública de 43 años, Ramírez cuenta que tras el supuesto ataque con dos drones cargados de explosivos, el 4 de agosto, compartió varios memes en un chat de Whatsapp de los vecinos del edificio. 

Una de las ilustraciones se mofaba de militares que salieron corriendo tras las explosiones, rociados por insecticida.

“No estaba hablando mal, no le estaba deseando la muerte al presidente. Los venezolanos agarramos las cosas a chiste”, se defendió la mujer.

De acuerdo con la ONG venezolana, las autoridades alegan que Ramírez usaba el apartamento para vender dólares y bolívares, en grave escasez. También la acusan de usar su casa como “restaurante”. Ella lo niega.

Ramírez recibió el apartamento en el 2015 en el marco de Misión Vivienda, programa mediante el cual el gobierno de Venezuela asegura haber adjudicado más de dos millones de unidades a familias pobres a precios altamente subsidiados.

La oposición denuncia que el gobierno no entrega títulos de propiedad sobre esos inmuebles, y los utiliza como mecanismo de control social.

“No es la primera vez que pasa esto en Ciudad Tiuna. Una vez desalojaron a una señora con dos menores a medianoche por tocar cacerolas” contra Maduro, comentó.

Por lo pronto, intenta denunciar el caso en la Fiscalía y que un juez le otorgue una medida de amparo. Desde el desalojo duerme en un motel.