Por Andrea Espinoza

A muchas personas jóvenes nos resulta normal considerar la cueca como el baile nacional, desde pequeños aparecía así en nuestros libros de estudio, nos hacían pintar incansablemente año tras años el copihue (símbolo nacional) y año tras año debíamos aprender a bailar la cueca, pero alguna vez hemos pensado ¿Qué significo esto? ¿Qué hay detrás de esto?

Para algunos será un dato desconocido para otros no, pero es un hecho: La cueca fue impuesta como baile nacional durante la época de la dictadura de Pinochet y sus secuaces el dia 18 de septiembre de 1979, posicionándose en ese época como un suceso digno de ser portada de la prensa. Esta imposición fue hecha mediante el Decreto N°4002 de 1980  en donde el ministerio de educación en su artículo 23 señala como obligatorio dentro de los programas de estudios y objetivos generales de educación física que alumnos aprendan a bailar la cueca y otros bailes nacionales, además de reflejar toda su ideología machista respecto de la mujer: la cual debe ser cortejada por el hombre, ella por su parte tímida, señorita es esquiva, se esconde tras el pañuelo, finalmente cede a los encantos de este huaso vestido de espuelas y costoso poncho, muy lejano por lo cierto a lo que pueblo pudiese costear, más bien correspondiente al huaso latifundista, dueño de terrenos.

Principalmente la música “permitida”, con la llegada de la dictadura, no se compromete con ningún tipo de fin político, contrario a lo que se venía gestando en Chile previo al golpe militar.

La nueva canción chilena surge como una necesidad de plasmar a través de la música lo que se vivía en el país desde los 60’: un ascenso de lucha de clases. Autores  como Víctor Jara, Violeta Parra, Margot Loyola, Gabriela Pizarro y Héctor Pavés. Estos Lograron posicionar el folclore como una alternativa de lucha, de protesta, como una caja de resonancia ante el avance de hombres y mujeres en la lucha por lograr una revolución, la cual se vio truncada por la dictadura de Pinochet que borró del léxico de las personas la palabra: clase obrera. Banalizo también el contenido de las artes y la música, expresión de esto es que las canciones pasaron de ser una forma de propagar ideas y de cantar de la cotidianidad de una obrera o un obrero a cantar sobre trivialidades de la vida, imponiendo también un estilo de vida a las masas.

Para nosotros un claro ejemplo de esto es el contenido en donde hablan sobre la verdadera forma de ser chilena y chileno, inculcando un descabellado patriotismo por el Chile que se estaba construyendo en plena dictadura militar.

Sin embargo las mujeres siguieron buscando formas de protestar ante las violaciones a los derechos  humanos, la represión y la desaparición de sus seres queridos: surge la cueca sola  gracias al Conjunto Folclórico de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD).

Esta danza fue presentada públicamente un 8 de marzo de 1978, en ese entonces gala torres cantaba:

En un tiempo fui dichosa

apacibles eran mis días,

mas llegó la desventura

perdí lo que más quería.

Me pregunto constante,

¿dónde te tienen?

Y nadie me responde,

y tú no vienes.

Y tú no vienes, mi alma,

larga es la ausencia,

y por toda la tierra

pido conciencia.

Sin ti, prenda querida,

triste es la vida.

A su vez la Nueva canción chilena se sigue desarrollando en el exilio y en la clandestinidad, como también la cueca popular, la cueca “del roto” como expresión de su cultura y costumbres.

Debido a todos estos datos que para nosotros también resultaron impactantes, es que creemos necesario luchar por borrar de lo cotidiano, cada herencia de la dictadura y sus imposiciones, luchemos por retomar la música y las artes con contenido de clase, con contenido popular, de lo que vivimos día a día a causa del modelo económico instaurado: Neo-liberalismo y sus políticas de mercado, música que revele nuestras ansias y deseos de luchar por derrocar toda la herencia de la dictadura ya sea en lo musical, en la educación, en el código laboral o en cuanto a los derechos sexuales y reproductivos.

Quizá sea difícil para muchos poder acordar una opinión unánime al respecto de la temática que presentamos  o para otras y otros estaremos radicalmente equivocados pero creemos que es importante poder al menos reflexionar al respecto.

 


Este texto fue publicado originalmente en este blog