Al ex presidente de la Cámara de Diputados de Chile, Marco Antonio Núñez, se le acusa de lo que algunos mal llaman “porno venganza”. Esto porque el concepto venganza de alguna forma justifica el crimen de difundir imágenes íntimas de una ex pareja sin su consentimiento.
Marco Antonio Núñez se enfrenta a una querella criminal por supuestamente tomar y exhibir fotos íntimas de su expareja en redes sociales sin su consentimiento, y por el presunto delito de amenazas.
Según un reportaje publicado por la emisora Radio Bío Bío, la querella fue presentada el 7 de septiembre pasado. El exparlametario del Partido Por la Democracia (PPD) es acusado, junto con una funcionaria del Congreso, por Paula Arriagada.
La acción legal detalla que Núñez habría fotografiado a la querellante semidesnuda cuando eran pareja, sin su autorización.
Según la demanda, en octubre de 2017, Arriagada y Núñez comenzaron a salir. Al poco tiempo, la demandante se enteró de que una mujer, secretaria en el Congreso, la había insultado fuertemente por Twitter: “Existirá alguien más maraca, zorra y puta que la Paula Arriagada? No creo, no lo he visto”, habría escrito.
Por ello, Arriagada le escribió por WhatsApp a la mujer para que le dijera a la cara cuál era su problema. Ya en ese entonces, la denunciante había escuchado que la acusada había tenido una relación con Núñez.
Ante la situación, Arriagada conversó con el entonces diputado, quien le contó que había tenido una relación informal con la secretaria, con la que se juntaba cada uno o dos meses, ocasiones en las que tenían sexo. Con la funcionaria nunca fue una relación formal y pública: con Arriagada la relación era formal, y eso había dejado “despechada y loca” a la ex, según habría dicho Núñez.
Núñez habría asegurado que hablaría con la funcionaria. Sin embargo, el 29 de abril de 2018, la querellante pidió al ya exdiputado que borrara un comentario de la mujer en su cuenta de Instagram y que la bloqueara, lo que él hizo.
A las tres horas la mujer habría llegado hasta la casa de Núñez, quien dijo que ella estaba “borracha y empastillada”. Más tarde Arriagada recibió un mensaje de audio en Whatsapp: “Mira conchetumadre, deja de huevearme culiá porque a la próxima vez te tiro a la PDI. Estoy con Marco ahora, así que deja de huevearme hija de la grandísima puta, ¿me entendiste? Córtala, hueona, córtala, porque tengo cómo cagarte hija de la grandísima puta”.
Esa noche Arriagada terminó la relación con Núñez. El 13 de mayo volvieron, después de que el exparlamentario llegara hasta su domicilio para pedirle perdón.
Una vez que terminaron las elecciones, finalizó la relación, y en julio Arriagada renunció al PPD.
Aunque ella había dejado a Núñez, a finales de ese mes surgió una cuenta en Instagram en la que aparecía una foto de la secretaria con el exparlamentario. Unos días después de creada, se publicó en esa cuenta una foto de Arriagada con el torso desnudo. La imagen, de acuerdo a la querellante, habría sido capturada sin su consentimiento mientras se cambiaba de ropa cuando compartía con Núñez en Tunquén. El único que pudo haber tomado la fotografía fue el exparlamentario.
Más tarde se subieron otras fotos de Arriagada con insultos, hasta que la cuenta fue bajada. En otra cuenta, activada poco después, la demandada aparecía en ropa interior, en la casa en Vitacura de Núñez. “Lo más grave es que esas fotos fueron tomadas por el expresidente de la Cámara de Diputados, mientras aún ostentaba el cargo de ‘honorable’“, se lee en la querella.