El éxodo es una realidad que el gobierno de Nicolás Maduro trata de esconder bajo la alfombra mientras los países vecinos intentan ayudar y el venezolano de a pie protagoniza en silencio. Millones de familias han sido separadas por migración masiva de criollos, impulsada por la crisis política, económica y social en la que está sumergida Venezuela.
Las cifras de la crisis migratoria siguen aumentando de manera alarmante. Alrededor del 10 % de la población venezolana, de los 28 millones 900 mil ciudadanos contabilizados, ha migrado hacia otros países, de acuerdo a la reseña de 2001.com.ve.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) advirtió que diáspora venezolana podría compararse a la migración masiva de la población africana a través del Mediterráneo, donde miles de personas escapan de la guerra y el hambre para conseguir un mejor futuro en continente europeo.
La Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), calculó que en junio de 2018, la masiva movilización se ubica en unos 2,3 millones de personas desplazadas a otras regiones de Latinoamérica.
La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) calificó al éxodo de los venezolanos como “uno de los movimientos de población masivos más grandes en la historia de América Latina”.