“Nos estamos preparando para defender Venezuela hasta el último palmo cuando sea necesario”, dijo el ministro venezolano para la Defensa Vladimir Padrino López, al recibir dos bombarderos rusos capaces de llevar armas nucleares.
Expertos aseguran que con esta acción, Nicolás Maduro está tratando de mostrar al mundo que aún cuenta con amigos dispuestos a salir en su defensa ante temores de una intervención extranjera.
A Venezuela arribaron dos bombarderos estratégicos rusos Tu-160, que aterrizaron el lunes en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía tras un vuelo de 10,000 kilómetros. Las aeronaves tienen capacidad de transportar misiles crucero con ojivas nucleares en un radio de 5,500 kilómetros. Esta clase de bombarderos participaron en la campaña rusa en Siria, donde lanzaron misiles crucero Kh-101 armados con ojivas convencionales, reseñó El Nuevo Herald.
En declaraciones a la prensa, Padrino López agregó que que un avión de carga An-124 Ruslan y un avión de pasajeros Il-62 acompañaron los bombarderos a Maiquetía. Por su parte, el Ministerio de Defensa de Rusia, el país envió a Caracas una escuadrilla de aviones que incluía los dos bombarderos.
Según expertos consultados por el diario estadounidense, la presencia de esos barcos en aguas venezolanas representan una provocación que amenaza el equilibrio geopolítico de la región. “Padrino aquí lo que está diciendo es que ellos se están preparando para defender a Venezuela y no están solos, cuentan con los rusos”, comentó al Herald Herbert García Plaza, ex ministro de Maduro.
Las palabras de Padrino López contienen un alto nivel de simbolismo y la idea que ellos están tratando de proyectar es que se está conformando “una alianza para la guerra”, explicó García Plaza. “Ellos están conscientes que a partir de enero van a quedar totalmente aislados y van a ser declarados como un Gobierno ilegal”, explicó García Plaza.