Es paradójico. Más aun si se toma en cuenta que quien lo propone es miembro de la secta del Opus Dei. Un grupo de niños será el encargado de vigilar que las tiendas no vendan alcohol a otros niños.
No importa que el trabajo nocturno de menores de edad esté sancionado por ley.
Así es la propuesta de Joaquín Lavín, alcalde de Las Condes, en Santiago de Chile, frente a su preocupación por la venta de alcohol a menores de edad.
“No hay suficiente fiscalización”, señaló en una reciente entrevista en televisión donde reveló la medida que adoptarán próximamente: una “brigada encubierta” de adolescentes para fiscalizar si se cumple la prohibición de vender alcohol a menores en la comuna.
Según detalla Emol, la idea contempla que los jóvenes se acerquen a los locales e intenten comprar alcohol para comprobar si respetan o no la normativa, lo que permitirá fiscalizar rápidamente los negocios y cursar multas.
La subsecretaria de la Niñez, Carol Bown, valoró esta medida. “En general, creemos que hay que apoyar las políticas que tienen que ver con la protección de niños”, señaló al matutino, aunque advierte de paso que se deben respetar los derechos de los menores. “Si van a tener niños o adolescentes trabajando, se tiene que cumplir la normativa”.
Por su parte, la defensora de la Niñez, Patricia Muñoz, planteó sus dudas sobre la posibilidad de que esta medida constituya trabajo infantil. “También hay un tema de seguridad, que implica cómo se va a brindar protección a los niños en esta idea del alcalde”.
El último estudio realizado por Senda sobre la disponibilidad y acceso a drogas entre escolares indica que la principal forma que tienen los adolescentes para conseguir alcohol es a través de la compra directa.