El ex presidente colombiano Álvaro Uribe vuelve a estar en el ojo del huracán después de que la revista Semana publicara una denuncia por espionaje en la Fiscalía General de este país. Lo paradójico del caso es que se estaría usando la sala de interceptaciones contra el terrorismo, para realizar interceptaciones ilegales a funcionarios de la misma entidad.
A los funcionario corruptos de la entidad “les pagaban entre 2 y 6 millones de pesos mensuales a cambio de permitirles introducir números, que camuflaban en medio de casos contra organizaciones terroristas. Muchas de esas interceptaciones ilegales tenían el fin de chuzar a investigadores o funcionarios, policías y militares, que los investigaban a ellos o a sus ‘clientes’, algunos narcotraficantes”, expresó Semana.
Ahora bien, en este caso de corrupción en el manejo de las salas de interceptación de la Fiscalía, también está involucrado el expediente del caso de Álvaro Uribe. Se trataría de varias grabaciones que se han perdido del expediente con el que la Corte Suprema de justicia llamará a indagatoria al senador en los próximos días.
El alto tribunal había ordenado la investigación al expresidente. Sin embargo, llamó la atención que misteriosamente la Fiscalía no grabara algunas llamadas y que al menos otras seis “habrían sido alteradas” respecto de este caso.
Así lo reveló el informe de peritaje revelado por la revista Semana:
“Al analizar un paquete de audios, peritos encontraron ‘fuertes indicios’ de algún tipo de ‘manipulación’ en llamadas ocurridas el 8, 20, 24 y 30 de marzo de 2015. ‘Sus fallas o transformaciones no ocurren en etapas cercanas de la reproducción sino tienen inicio funcional y luego se presentan cambios en la señal o a lo largo de su duración, solo se presentan fragmentos pequeños con información seguidos o superpuestos a silencios o tonos puros (pitos)’”.
Según Semana, lo preocupante en el caso del expediente de Uribe, es que los audios que fueron alterados, estan relacionados con conversaciones que sostuvo “el exmayordomo de la finca de los Uribe Vélez y padre del exintegrante del bloque metro de las AUC, Óscar Monsalve, con el también señalado de cofundar dicho grupo paramilitar, el ganadero Juan Guillermo Villegas”.
Monsalve y Villegas, están vinculadas a la investigación por la creación del Bloque Metro de las Autodefensas Unidas a Colombia (Auc) en Yarumal, Antioquia.
Ahora bien, desde que se hizo pública la investigación al senador del Centro Democrático, Monsalve estuvo bajo la presión de Villegas, y aunque a pesar de eso, fueron interceptadas algunas llamadas, con la manipulación de los audios en la Fiscalía, esas llamadas se perdieron. “Villegas se comunica con Monsalve a las 2:36 p.m. en una llamada que dura 12 minutos, pero de la que solo se escuchan 30 segundos”.
Por tanto, la declaración del exmayordomo de la finca de Uribe “era clave” en la investigación que adelanta la Corte a Uribe por manipulación de testigos. En dicho caso, Uribe quiso enlodar al senador Iván Cepeda, que salió libre de las acusaciones.
Cabe mencionar que respecto a este caso de corrupción en la Fiscalía, varios funcionarios ya han sido capturados, están al servicio de redes ilegales que buscan información delicada de empresarios o funcionarios que lideran investigaciones delicadas para el país.