La lucha contra la delincuencia es uno de los comodines favoritos de la administración de Sebastián Piñera. Con ella llegó por primera vez a la presidencia de Chile y cada cierto tiempo vuelve a ponerlo sobre la mesa. Así ocurrió esta semana cuando el empresario acusado por el desfalco del Banco de Talca aprovechó una entrevista con Radio Pudahuel para criticar al Poder Judicial.
“Muchos jueces no aplican bien la ley (…) La principal labor de la justicia es proteger a los inocentes, y el debido proceso para los responsables, pero muchas veces da la impresión de que algunos jueces no entienden eso”, sostuvo el presidente chileno.
“Creo que hay algunos jueces que no están aplicando la ley, que están fallando de forma equivocada, que le dan un manto de impunidad a los delincuentes. Y esos jueces no pueden seguir así”, añadió.
Sin embargo, la crítica directa de Piñera hacia el Poder Judicial no es nueva. Ya en su primera administración tuvo una serie de desencuentros públicos, cuando aseguró que su Gobierno iba a terminar con la delincuencia y acusó una “puerta giratoria” de la justicia a favor de los delincuentes. También puso en marcha la idea -después desechada por el Gobierno- del Observatorio Judicial para que la ciudadanía pueda evaluar la labor de los jueces y magistrados, un tema frente al cual el entonces presidente de la Suprema Milton Juica levantó su voz.
En esta segunda administración, los desencuentros se repitieron con ocasión de las mediáticas rondas policiales, catalogadas de “shows mediáticos” por parte de la oposición, e incluso mereció reparos por parte del Poder Judicial. Pero la respuesta del Mandatario en esa oportunidad, fue que “aunque saturemos los tribunales, vamos a seguir haciendo estas rondas de vigilancia preventiva”.