Se trata de ‘Narcolombia’, una exposición realizada bajo la curaduría de Andrea Infante, Ómar Rincón, Lucas Ospina, Xavier Andrade y Paulo Leuro que estará abierta al público hasta diciembre del presente año en el edificio Julio Mario Santo Domingo, de la Universidad de Los Andes.
Con tal proyecto se busca exponer y analizar la forma en que el narcotráficø ha permeado la cultura colombiana. Son tres los frentes abordaros allí: el arte, el análisis de medios y la antropología.
Allí puede apreciarse un llamativo mural donde Antonio Caro tiene puesta una camiseta con la frase “Todo está muy facho”. Aparecen alrededor los rostros de figuras públicas como Desde Daneidy Barrera (Epa Colombia), Alejandra Azcárate, Amparo Grisales, Marta Lucía Ramírez, Uribe, Santos, Duque, la primera dama, Pastrana, Vicky Dávila, María Fernanda Cabal, Pacho Santos, Francisco el Matemático, según se relata en El Espectador.
Y es que uno de los planteamientos que allí se hacen es que todos, de una u otra manera, promovemos el narcotráficø por medio de las lógicas capitalistas de consumo.
La investigación para la elaboración de la exposición se remonta a 2017 y recoge insumos informativos que resultan familiares al público, pero entran en un contexto de conciencia directa.
“Nuestra ética a la colombiana tiene un criterio ambiguo: lo narco. Este adjetivo se usa para calificar negativamente nuestro gusto, nuestro exhibicionismo y la morαl del todo vale, o sea, para exhibir una superioridad morαl sobre los otros”, es una premisa de Ómar Rincón sobre la que estructura en gran medida la obra.
También se exhiben en ‘Narcolombia’ portadas de periódicos colombianos en los años 80 y 90, en los que se habla de los carteles de la droga, en contraste con portadas de revistas internacionales en las que se habla de escándalos de estrellas musicales en relación con el consumo de estupefacientes. El humor es inevitable, pues ha sido una de las formas más directas de narrar el narcotráfico en Colombia.
“Lo narco no es solo un tráficø o un negocio; es, sobre todo, un estilo, una estética, una ética que cruza y se imbrica con la cultura y la historia de Colombia, una revolución que cambió los patrones de gusto en una sociedad altamente clasistα, racistα y patriarcal. El efecto temporal de este embale, de este alucine colectivo, produce una de las expresiones más puras del capitalismo actual: el yo, el yo valgo por el billete, yo soy mi visaje, mi discurso, mi violenciα; no es un producto colombiano, es la selfi mundial del capital”, afirman en consenso los curadores.
Hay, además, una foto en la que se puede apreciar a Iván Duque en compañía de José ‘Ñeñe’ Hérnández y su esposa María Mónica Urbina.