La radiotelevisión pública británica, BBC, ha optado este domingo por abrir la emisión del Mundial de Catar de manera distinta al resto de medios de comunicación. La citada cadena iniciaba su transmisión de la ceremonia con un reportaje que pretendía denunciar la violación de derechos humanos de este Mundial.

En lugar de emitir la ceremonia que da el pistoletazo de salida al Mundial de Fútbol justo antes del inicio del primer partido, la radiotelevisión pública se decantó por una programación especial que aborda el contexto del evento en el que las diferentes selecciones se enfrentarán para decidir cual es la mejor del mundo.

Gary Lineker, presentador de la previa al partido entre Ecuador y Catar, afirmó al iniciar esta emisión que “es la Copa del Mundo más controvertida de la historia y ni siquiera se ha pateado una pelota”.

Lineker explicó que, “desde que la FIFA eligió a Qatar en 2010”, el evento deportivo se ha visto envuelto en acusaciones por corrupción, explotación laboral de trabajadores migrantes que ha derivado en 6.500 muertes a causa de las condiciones de trabajo en la construcción de los estadios y la vulneración de derechos de las mujeres y las personas homosexuales. “Hay un torneo que se jugará, que se verá y disfrutará en todo el mundo. Limítense al fútbol, dice la FIFA. Bueno, lo haremos, al menos durante un par de minutos”, finaliza Gary Lineker durante la primera retransmisión del Mundial catarí.

La BBC contextualiza el Mundial

Cuando la cadena interrumpió brevemente la emisión, el programa destacó la situación de corrupción que está viviendo la organización del evento deportivo desde que fue elegido Catar como destino de celebración del Mundial.

Mientras el resto del mundo estaba pendiente de las actuaciones de BTS o de Maluma, los británicos se encontraron con un reportaje del periodista Ros Atkins en el que se contextualizaba la situación en la que este Mundial se había desarrollado. En este se incluye una entrevista a James Lynch, director adjunto del Programa de Amnistía Internacional.

El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, fue criticado tras sus palabras del pasado sábado. “Tengo unos sentimientos fuertes, hoy me siento catarí, hoy me siento árabe, hoy me siento africano, hoy me siento gay, hoy me siento discapacitado, hoy me siento un trabajador emigrante”, anunciaba mientras criticaba la “doble moral” europea. Sin embargo, mientras la FIFA está defendiendo a Catar por beneficios económicos, el Mundial está blanqueando la violación de derechos del régimen catarí.

De este modo, el primer partido (Catar-Ecuador) también se ha visto envuelto en críticas ante la posibilidad de un resultado pactado según informa el diario El Debate. Presuntamente, Catar pagó 7,4 millones de dólares a varios jugadores de la selección ecuatoriana para dejar el marcador a 1-0, dando así la victoria a los cataríes. Sin embargo, esta presunta extorsión en los resultados del partido se ha visto difuminada por un 0-2 que lleva a la victoria del partido de apertura del mundial a la selección visitante.